Nuestra Historia
Aguas Más Profundas, es el resultado de un llamado irrevocable de Dios, que se materializa en una época de crisis mundial, pero de avivamiento espiritual, uniendo dos familias dotadas con el poder del Espíritu Santo para anunciar las buenas nuevas a los pobres y liberar a los cautivos y oprimidos, cuya misión celestial es ir por la oveja perdida e invitarla a navegar y sumergirse en aguas más profundas para que quede atrapada en las redes de nuestro Señor Jesucristo para la Gloria y honra de nuestro Padre Eterno.
Hernán Sáenz Solano, tiene un encuentro personal con el Dios vivo de Israel en el año 1.998; Después de un giro radical en su vida, realiza estudios en teología y mientras presta sus servicios a la patria por 24 años en la Policía Nacional, donde se forma como piloto, administrador y alcanza el grado de Teniente Coronel, sirve como consejero matrimonial ad honorem junto con su esposa, a través de seminarios, charlas, talleres y encuentros de pareja.
En el año 2.016 fue consagrado como siervo del Señor. El 12 de julio de 2.020 en cumplimiento a una promesa dada por Dios “No temas; desde ahora serás pescador de hombres”, y entendiendo espiritualmente de acuerdo a Lucas 5:1-11 que para tener esa pesca abundante era necesario llevar la barca a aguas más profundas.
El pastor Hernán Sáenz Solano, con un grupo de creyentes inicia Aguas más Profundas Iglesia Cristiana.
Declaración de sueños:
Esta declaración de sueños no tiene que ver con cosas materiales como instalaciones, construcciones, terrenos o equipos. Tiene que ver con almas, con vidas, con personas. La iglesia que sueño:
– Sueño con una iglesia que sirva a Dios de acuerdo con lo que establece la Biblia y no de acuerdo con los estándares del mundo. Aguas profundas es parte del cuerpo de Cristo no es una empresa, no es un club social.
– Sueño con una iglesia que se niegue a sí misma y lleve cada día la cruz de Cristo.
– Sueño con una iglesia que acepte el precio que tiene seguir a Cristo. Si fuere necesario a no tener donde recostar la cabeza, dejar que los muertos entierren a sus muertos y a no mirar atrás una vez ponga la mano en el arado.
– Sueño con una iglesia que sea lavadora de pies, que le deja los honores al Señor Todopoderoso. Una iglesia donde el que quiera ser líder deberá ser sirviente de los demás.
– Sueño con una iglesia que no pretenda servirle a los que están afuera sin servirle primero a los que están en casa.
– Sueño con una iglesia de oración y ayuno.
– Sueño con una iglesia que sea una lampara encendida que se ponga en lo alto.
– Sueño con una iglesia que sea un odre nuevo donde se pueda contener el vino nuevo.
– Sueño con una iglesia que deposite toda ansiedad sobre Cristo.
– Sueño con una iglesia que se Someta a Dios y resista el diablo.
– Sueño con una iglesia que se mantenga firme en la fe.
– Sueño con una iglesia que practica el dominio propio y está alerta.
– Sueño con una iglesia libre en Cristo y que se mantenga en esa libertad.
– Sueño con una iglesia autentica, sin máscaras y sin religiosidad.
– Sueño con una iglesia que no juzga ni lanza piedras.
– Sueño con una iglesia que no discrimina.
– Sueño con una iglesia que toca, busca y llama para alcanzar almas para Dios.
– Sueño con una iglesia que trata a los demás tal y como quieren que ellos la traten.
– Sueño con una iglesia que ora por quienes la persigan.
– Sueño con una iglesia esforzada y valiente.
– Sueño con una iglesia que practica la hospitalidad y la generosidad.
– Sueño con una iglesia que respeta y se somete a las autoridades.
– Sueño con una iglesia ungida, transformada y libre con un pesca abundante y variada, para ser usada como un vaso escogido donde otros puedan beber del Agua que quita la sed, y usada como una red lanzada en aguas más profundas donde los perdidos queden atrapados en los brazos amorosos del padre y encuentren libertad.
Declaración de fé
La única base para nuestra fe es la Biblia, la Palabra de Dios infalible que incluye el Antiguo y Nuevo Testamento. Inspirada por el Espíritu Santo, la Biblia es la autoridad suprema y final todo asunto de fe y práctica. Creemos que:
- Hay un Dios verdadero, que existe eternamente en tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Cada uno de los cuales posee por igual todos los atributos de la Deidad y las características de personalidad.
- Jesucristo es Dios, la Palabra viviente, encarnado por el Espíritu Santo y la Virgen María. Jesús fue completamente Dios y completamente hombre, dos naturalezas en una persona.
- El Padre envió a Jesús, quien vivió una vida sin pecado, para hacer una expiación sustitutiva por nuestros pecados al morir en la cruz, satisfaciendo así la justicia divina, y resucitó para que todos los que creen puedan tener vida eterna.
- Ascendió al cielo y está sentado a la diestra de Dios Padre, y como el único mediador entre Dios y la humanidad, intercede continuamente en nuestro nombre.
- Dios creó a Adán y Eva a su imagen y semejanza, pero se rebelaron contra Dios y pecaron, lo que los separó de Dios trayendo muerte espiritual para ellos y sus descendientes.
- Todos nacemos físicamente vivos, pero espiritualmente muertos en nuestros delitos y pecados. Por lo tanto, todos necesitamos perdón y que nuestros espíritus se unan con Dios a través del Espíritu Santo.
- Nacemos de nuevo espiritualmente cuando recibimos a Cristo, y ahora estamos vivos en Cristo. Somos salvos por la gracia de Dios a través de la fe que resulta en buenas obras, las cuales Dios preparó de antemano.
- Nuestros cuerpos son templos del Espíritu Santo. Los que tienen al Hijo tienen vida, y los que no tienen al Hijo no tienen vida. Dios ha escrito esto para que sepamos que tenemos vida eterna. Su Espíritu testifica con nuestro espíritu que somos hijos de Dios.
- El Espíritu Santo es el Señor y el dador de la vida. Él convence al mundo de pecado, y guía y da poder a los creyentes, para vivir una vida justa y dar fruto para la gloria de Dios. Por la gracia de Dios podemos cumplir el Gran Mandamiento de amar a Dios y a los demás y la Gran Comisión de hacer discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, Hijo y Espíritu Santo.
- Jesucristo es la cabeza de la Iglesia, su cuerpo, a quien dio ministros según Efesios 4:11 para capacitar a los santos para la obra de servicio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos alcancemos la unidad de la fe.
- Nos reunimos para adorar a Dios en Espíritu y en Verdad, y participar del cuerpo y la sangre de Cristo en la Santa Cena / Comunión.
- Creemos que Dios nos creó varón y hembra y que el matrimonio es una unión sagrada entre un hombre y una mujer.
- Creemos que Satanás fue un ser creado que cayó del cielo y se convirtió en el dios de este mundo. Él gobierna el reino de las tinieblas a través de una jerarquía demoníaca que continuamente tienta, acusa y engaña al mundo entero. Jesús vino para deshacer las obras del diablo y transferirnos del reino de las tinieblas al reino de su amado Hijo.
- En la muerte física, los verdaderos creyentes se separan de sus cuerpos terrenales, pasan a estar con Dios y esperan ansiosos la resurrección de los muertos y la vida del mundo venidero.
- En la muerte física, el nombre del no creyente no estará en el libro de la vida del Cordero en el juicio final, y permanecerá eternamente separado de Dios.
- Jesús vendrá nuevamente en poder y gloria para consumar el fin de los tiempos.
